En esta entrada del blog, os contamos una historia que ocurrió en 1731, y además os presentamos a Sara Baena, nueva colaboradora que se incorpora al equipo de alacaja compartiendo contigo los resultados de su investigación de unos hechos que juegan con la leyenda y la realidad.
¡Bienvenida Sara!
El presente texto es el resultado de una investigación centrada en los extraños acontecimientos que giran en torno a la desaparición de un niño en pleno Siglo XVIII. El posterior hallazgo del cadáver de Alonso Ruperto varios días después creó tal expectación que los habitantes de la villa del Pontón de Don Gonzalo comenzaron a llamarlo “Niño Mártir”, algo que corrió entre los pueblos cercanos.
Con la lectura de este artículo veremos también cómo se puso en marcha un proceso judicial para encontrar al presunto culpable, así como los milagros que realizó el niño después de muerto. Al mismo tiempo, nos acercaremos a la vida cotidiana de esta época, viendo cómo la religión era el centro de la comunidad, y que entroncaba directamente con el gobierno municipal.
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Sara Baena Fernández.